A pesar de que una buena parte de las bandas de la escena indie-pop de San Francisco han desaparecido, sigue siendo una de las ciudades más punteras dentro de este estilo de música. Porque, aunque muchos grupos hayan pasado a mejor vida, hay músicos que no se rinden. Es el caso de Glenn Donaldson, antiguo miembro de Skygreeen Leopards y Art Museums, además de colaborador habitual de WoodsThe Fresh & Onlys o The Mantles, que sigue disfrutando con las cosas sencillas, como el buen pop de guitarras. Y eso de hay mucho en The RedsPinks and Purples, el que es su proyecto actual.  

You Might Be Happy Someday es su segundo trabajo, y como todo lo que hace en su carrera, está creado en la cocina de su casa –describe su música como DIY Kitchen Pop-. Una casa que está en el pintoresco barrio de Richmond, que está lleno de viviendas de colores pastel, las cuales, al parecer, le han servido de inspiración. Quizá, por eso, estamos ante un trabajo tan acogedor, en el que su pop te envuelve como si fuera una manta en invierno. Y de ahí que nos venga a la mente la melancolía de sellos como Sarah Records o Creation cuando escuchamos estas canciones.  

Nos encontramos ante un álbum para disfrutar, en el que las melodías pop desembocan en estribillos pegadizos, y en el que las guitarras suenan brillantes y luminosas. Algunos y algunas dirán que esto no es nada nuevo, y puede que tengan razón, pero suena tan bien, que es algo que no hace falta ni mencionar. Porque, de sus ocho canciones, no hay ni una que sobre. El POP, así, con mayúsculas, que aparece en cortes como “Last Summer in the Rented Room”, “Forgotten Names” o “Sex, Lies & Therapy”, está para disfrutarlo, no para diseccionarlo. Así que ya sabéis, si sois amantes del buen pop de guitarras, este es uno de vuestros trabajos de 2020.