Mamá y papá es una comedia negra, negrísima, sobre un tema inconfesable: ¿Qué padre no ha tenido ganas de «matar» alguna vez a sus hijos? Utilizando a unos desatados Nicolas Cage y Selma Blair como villanos, el director Brian Taylor fabrica una película inclasificable y cargada de mala leche. Coautor de las macarras Crank: veneno en la sangre (2006), su continuación, Crank: alto voltaje (2009) y una secuela imposible como Ghost Rider: Espíritu de venganza (2011) se puede decir que la mayor virtud de Brian Taylor como cineasta es que nunca se ha tomado sus películas en serio.