¿Qué queréis que os diga, si desde muy pequeñito he sentido una profunda admiración por Elvis? ¿Cómo queréis que no me emocione al recordar lo que significó para mí la primera vez que escuché ese torbellino llamado Stray Cats? Es inevitable rememorar todos esos buenos recuerdos al escuchar Torro (Sleazy Records, 2014), el primer disco en solitario del maestro Pike Cavalero, un disco increíble, respetuoso con la tradición, pseudo conceptual y sobre todo, hecho con muchísimo corazón. Esas son las cosas que pasan cuando la pasión por algo, trasciende la época en la que te ha tocado vivir.