Permítanme que empieza quitándole el foco al protagonista. Hablemos de las coristas. Ya el documental “A 20 pasos de la fama” nos dejaba claro el fundamental papel que jugaban esas casi anónimas profesionales a la hora de dotar de encanto a cualquier tonada clásica, o incluso de generar ganchos musicales que terminan por definir una grabación.

Todo esto viene porque Love & Hate es un disco de esos, y porque esos coros son una de las aportaciones principales de BrianDanger MouseBurton, el productor estrella que acudió al rescate de Michael Kiwanuka cuando éste se encontraba en pleno atasco creativo ante la presión de sacar adelante el “difícil segundo álbum”.