La prestigiosa estela de Manta Ray, donde Nacho Álvarez residió como bajista durante 16 años, ejerce de tarjeta de presentación de su nuevo proyecto en casi-solitario, aunque sirve más bien poco para hacernos una idea de lo que nos aguarda. Si acaso, podríamos usar como referencia algunos de los recorridos trazados por el también ex-Manta Ray Nacho Vegas en su carrera, aunque Nacho Álvarez se antoja mucho más lúgubre y teatral que su viejo compañero de batallas.