Ahora que Public Image Limited (PiL) acaban de anunciar el lanzamiento de un nuevo disco, confirmando que el retorno a la actividad de la banda de John Lydon, más conocido como Johnny Rotten, iba muy en serio, la publicación en castellano de este La ira es energía se antoja una feliz coincidencia. Cortesía de Malpaso, que añade otro “rebelde con causa” a su fantástica lista de memorias musicales publicadas, como ya hiciera con Frank Zappa, Pete Townshend o Neil Young —todas comentadas en Indienauta—, esta obra es absolutamente indisociable de su autor. Y el punk se hizo verbo. O el verbo se hizo punk. Tanto da.