La fe sónica
Cada vez Peter Kember regresa tiene una buena banda de acólitos en la capital esperándole para verle en directo ¡Eso es fe y lo demás son tonterías! Sonic Boom (o Spectrum otro de sus proyectos musicales) es muy querido en Madrid como pudimos comprobar anoche por el buen número de público que congregó en la presentación de su último trabajo ‘All Things Are Equal’ (Carpark, 2021). Lo que vino a ser un showcase extendido, porque duró casi una hora (los showcases son más cortos normalmente, la mitad) o un live act al modo de los djs o músicos de electrónica.
Quien fuera cómplice de J Spacemen, el alias de Jason Pierce (Spiritualized) en Spacemen 3 durante la década de los 80, se sirve de visuales para hacer un show que tiene algo de rave, a un tempo bajo, en lo que parece una misa sónica. Un trance de ideas y de músicas que tienen un punto de conexión con lo universal y con estructuras repetitivas que envuelven y mecen. Y que convierten a Sonic Boom en un maestro de ceremonias, en un chamán musical. Por momentos parece que estás de viaje astral. Y es que los directos de Sonic Boom tienen algo de litúrgico, y de lisérgico.
Sonic Boom busca que el envoltorio ayude para una causa mayor de conexión con el sonido, para demostrar cómo la música envuelve, se expande, captura mentes y conecta entidades. Las visuales conducen el viaje; y las luces láser, iluminan, creando destinos posibles. Me dejó frío por momentos la linealidad y la repetición de ciertos patrones. Pero admiro el valor de lo que ofrece, de su propuesta transversal y de configuración de una sonoridad libre, a veces fugaz, otras que permanece en los minutos. Pero he de reconocer que Peter Kember tiene madera de chamán musical. Con el tratamiento de su voz, que construye voces, distorsionando, y consiguiendo evocar, llamar la atención y dirigir al respetable en esa comunión colectiva. Una suerte de psicodelia digital nos convoca, en búsqueda de lugares posibles en la dimensión sonora y experiencial. “Just Imagine” o “Just a Little Piece of Me” consiguen embaucarte, por su poder mágico, cual mantra, o también “On a Summer’s Day”. Con “The Way tha You Live” o “Tawkin Tekno” es como si una suerte de krautrock relajado converge con ese universo onírico. El todo se cierra con “I Feel a Change Coming On”, como si de verdad el baño sonoro nos hubiera cubierto con una capa de novedad, como saliéramos con otra capa de vida. Sonic Boom consigue enviarte a otra dimensión, sea esta más o menos original, repetitiva o melódica, el sonido crece y su poder se extiende. Esto es fe sonora.