Nadie dijo que el camino para un dramaturgo incipiente sería fácil, ni mucho menos. Estel Solé podría escribir todo un tratado sobre las trabas con las que el circuito de teatros convencional recibió su primera propuesta teatral; sin embargo, ella, lejos de caer en el desánimo más absoluto, buscó una solución para estrenar aquel texto que había modelado conjuntamente con sus amigos/actores, y encontró en Bárbara Aurell la mejor cómplice: ella le ofreció el comedor de su casa como escenario improvisado para la primera representación de Animals de companyia, un primer éxito al que siguieron las actuaciones en más de setenta pisos por toda Catalunya y una gira por Centroamérica, el rodaje perfecto antes del gran premio, el estreno en el Club Capitol, un merecidísimo reconocimiento para esta falsa comedia sobre la amistad y la soledad que el público barcelonés ha recibido con entusiasmo, agotando las entradas en varias ocasiones y convirtiéndola en una recomendación obligada.

La fórmula de Solé parece sencilla: un grupo de amigos organizan una cena con la que celebrar el retorno a casa de Bet, una joven que ha pasado los dos últimos meses en un centro psiquiátrico. Las buenas intenciones con las que ultiman los preparativos de la velada se verán trastocadas por la necesidad de llegar a un acuerdo para mantener la mentira –aparentemente inocente– con la que uno de los chicos hace semanas que oculta la realidad a la muchacha. Mantener el engaño no será una empresa fácil, los cuatro amigos tendrán problemas para llegar a un acuerdo sobre la versión que explicarán, así que será cuestión de tiempo que la cena tome una deriva terrible y difícil de solucionar, justo a medida que la noche avance y el alcohol, inevitablemente, comience a hacer estragos en ellos.

animals de companyia_capitolEl planteamiento inicial de la obra puede recordar, en cierto modo, el film Pequeñas mentiras sin importancia, pero lo cierto es que pronto Animals de companyia toma su propio camino: comienza como una comedia de enredos, a ratos un vodevil histérico más o menos clásico, pero es en la segunda mitad de la función, con los primeros reproches, cuando la obra se transforma en un notable drama cargado de verdad en el que se evidencia la dificultad por conservar la amistad cuando la sinceridad se convierte en un instrumento terriblemente hiriente y que destapa el egoísmo con el que a menudo tratamos a nuestros amigos, al mismo tiempo que comprobamos que, en el fondo, tan solo somos animales desamparados que necesitamos afecto urgentemente. Por otra parte, la trama también pone de manifiesto que no es fácil aceptar que nunca seremos aquel que un día soñamos y que las dudas, inherentes en muchos de nosotros, son malas compañeras de viaje: a menudo damos demasiadas vueltas para llegar a un lugar y en el trayecto perdemos un tiempo precioso que, por desgracia, nunca recuperaremos.

Además, uno de los grandes aciertos de Animals de companyia lo encontramos en su proceso de creación, en el que participaron los actores conjuntamente con la autora de la pieza. Esta característica potencia la naturalidad con la que cada intérprete defiende sus réplicas, con un valioso reparto en el que encontramos a Miriam Tortosa, Martina Tresserra y Jacob Torres, pero es justo destacar el trabajo de Eduard Buch y Mercè Martínez, dos grandes actores que captan buena parte de las miradas de los espectadores: él en su faceta más cómica, con un memorable monólogo, un discurso marcado por el alcohol tan divertido como vigoroso y en el que intuiremos cómo sería su vida si tuviera todo el valor del que carece; por su parte, ella protagoniza la faceta más dramática de la obra, espléndida en su fragilidad, cuando es incapaz de reprimir el llanto al comprobar el poco interés que sus supuestos amigos muestran hacia ella y sus sentimientos.

«Animals de companyia» se representará en el Club Capitol hasta el 15 de marzo de 2015.

Autora: Estel Solé
Dirección: Estel Solé
Intérpretes: Eduard Buch, Miriam Tortosa, Martina Tresserra, Jacob Torres, Mercè Martínez
Escenografía: Ramon B. Ivars
Iluminación y sonido: Bernat Treserra
Vestuario: Maria Armengol
Técnico teatro: Alfons Mas

Horarios: miércoles, jueves y viernes a las 20:00 horas; sábado a las 17:30 horas y a las 20:00 horas; y domingo a las 17:30 horas
Precio: de 17 € a 21 €
Idioma: catalán
Duración: 1 hora y quince minutos