Libros del K.O., de la mano del periodista Jorge Decarlini, nos propone 20 canciones, un libro de música tanto para curiosos como melómanos… Dedicado a desentrañar, como reza su subtítulo, las Historias, secretos y leyendas de un puñado de letras amadas. O que hay detrás de algunas de las piezas más emblemáticas de leyendas del calibre de Bob Dylan, los Beatles, Nirvana o Serrat, al lado de inclusiones en principio más sorprendentes como pueden ser Rocío Jurado, Concha Piquer o The Cranberries

Nacido en Cádiz en 1987, Jorge Decarlini es un periodista —con bastante de músico frustrado a tenor de la introducción— que, tras un periplo en redacciones locales, ahora ejerce de freelance colaborador en múltiples y muy diversos medios, tales como, entre otros, Jot Down, Público, Panenka, Líbero, El Confidencial y Letras Libres. Por si no fuera suficiente escritura, también pergeña cuentos y guiones. 20 canciones es su segundo libro, luego de su debut con ¡Milagro! (Éxtasis y sombras en El Palmar de Troya), también publicada por Libros del K.O..

Decarlini ha creado una obra ecléctica y amena. Con mucho de tributo a piezas y artistas clave, universales y de su «cancionero particular». Y, al mismo tiempo, una sana voluntad de indagar sobre la composición y significados de unas letras con enjundia —discutible que estas hayan importado en el pop, pero «Saoko, papi, saoko», en fin—. Buscándoles el detalle, contexto, subtexto o referencias, veladas o manifiestas, así como sus intimidades y secretos. El resultado son veinte pequeños —bueno, no tan breve en el caso de American Pie de Don McLean— trabajos de investigación que abordan y muestran nuevos enfoques a cada canción.  

Dada su naturaleza, por fuerza 20 canciones transita sendas bastante variopintas. Tenemos la deconstrucción «al uso», es decir estrofa a estrofa y con notable labor de hemeroteca, de temas como la reivindicativa Tatuaje de la Piquer, Born in the U.S.A. de Springsteen —poniendo de relieve lo erróneo de su asumido mensaje patriótico— o The Lonesome Death of Hattie Carroll de Dylan —cima de la canción de denuncia—. Después, más atractivo y sugerente a mi juicio, encontramos las que añaden el componente especulativo a las pesquisas, con la genial Eleanor Rigby —epítome lírico de la soledad— o la mencionada obra cumbre de McLean como ejemplos más estimables. Pero hay mucho más.

Porque acto seguido, Decarlini hace verdadera historiografía o, si se prefiere, «arqueología musical» en 20 canciones. Ya sea para explicarnos que tras Diamonds and rust de Joan Baez en realidad hay un mensaje a su ex pareja y compañero de escenarios más célebre. Invitarnos a recorrer el trayecto de Pequeño vals vienés, de Lorca a Leonard Cohen y Enrique Morente. O para desmontarnos las habladurías —con lógica base política no obstante falsas— alrededor de Ojalá de Silvio Rodríguez o Al alba de Luis Eduardo Aute. Incluso se convierte en un reportero en la —estupenda— búsqueda de la auténtica María la portuguesa de Carlos Cano.

20 canciones depara grandes momentos al lector. Muy entretenido y ligero —aunque, a mi juicio, la joya de la corona del libro, el trágico relato de la poetisa Alfonsina Storni inmortalizada por Mercedes Sosa en Alfonsina y el mar «toca la patata»—, aquí hay material de sobra para contentar a cualquier tipo de aficionado. Un «grandes éxitos» que le da una saludable «vuelta de tuerca» al ensayo musical —o colección de ensayos, siendo específicos—. Cada canción tiene su propia historia. Y muchas merecen ser contadas.